PERFECT DAYS (2023) Y EL MILAGRO DE UNA VIDA SUFICIENTE

Cada decisión corresponde a las elecciones que hemos querido siempre mantener para el bienestar de nuestra propia vida, donde a través de acurrucarnos dentro de una cotidianidad puramente perdurable, entenderemos cada día que la vida se basa en querer sentirnos lo más cercano posible a lo que queremos reflejar de nuestra propia alma, por medio de costumbres que nos indican constantemente que el mundo donde habitamos está saturado por la simple necesidad de compartir cada experiencia, dirigiéndonos por varias direcciones que nos señalan lo difícil que puede resultar mantener limpio aquel entorno que cohabitamos y nos refleja claramente lo lejano que nos sentimos los demás hacia cada persona; sobre todo la que crea equivocadamente, lo que es saber verdaderamente la importancia de cada elección que se pueda tomar.

Llenar aquel vacío evidente resulta complicado en algunos casos, cuando sin previo aviso la vida nos recuerda que nunca nada es tan sencillo y nos realza la realidad con golpes bajos que tratan de derrumbar lo poco que nos queda, aclarándonos no solo aquella soledad electividad, sino remarcando cada sentimiento del pasado como si se tratara de una historia interminable, tomando siempre el lado positivo del mensaje y dejándonos claro que por más que las cosas puedan construirse a través de un orden preestablecido, siempre podemos al final aprender de aquellas miradas que con muy poco puedan dedicarnos el mayor de todos los mensajes, uno que nos diga el significado final de todas las mayores consecuencias hacia esa esperanza que cada vez más nos identifica.

 

Dirigida por el cineasta alemán Wim Wenders y coescrita junto a Takuma Takasaki, nos presentan una obra maestra protagonizada increíblemente por el actor japones Kōji Yakusho (76th Cannes Film Festival: Best Actor) en una historia donde la cotidianidad se transforma en la más confortable historia de optimismo obsequiado, haciéndonos elegir la importancia de aceptarnos a nosotros mismos  a lo largo de nuestra existencia por lo que siempre quisimos ser, relegándonos en ser totalmente abiertos a cada decisión que aceptamos pero también completamente vulnerables a todo tipo de sentimientos y donde lograremos al final tomar la vida de la manera más correcta posible, hasta el fin de nuestros días y el inicio de nuestros mayores recuerdos.

Jesús Guerrero