CIVIL WAR (2024) Y LA DOCUMENTACIÓN DE NUESTRA PROPIA DECADENCIA
Llegamos a entender por democracia esa necesidad de poder expresar nuestras opiniones "sin ningún problema" por muy diferentes que puedan resultar al resto, creyendo inequívocamente que el respeto por el cual cualquier sociedad se amerita de creer en un futuro puramente propio, termina por demostrar severamente nuestros propios defectos; o por encima de todo nuestras mayores virtudes, aquellas que sin importar como siempre se mantendrán latentes en los peores momentos, porque en tiempos de guerra no importa el lado ni los sentimientos, al final siempre resaltara el instinto de supervivencia que nos identifica, como una manera de recordarnos nuestro papel en todo momento, siempre detrás de una cámara detallando cada momento.
El entender
porque las civilizaciones no pueden mantener un estado de supervivencia
eficiente, nos lleva a dudar duramente lo difícil que cada año resulta
cohabitar como seres subdesarrollados, con culturas extraviadas y
olvidadas, por medio de acciones
adoptadas de lideres manejables y egoístas, a través de discursos desgastados y
si fundamentos, haciéndonos entender que la conclusión del sistema se aproxima
y que cada vez más nos replantea la necesidad de obtener lo que realmente
deseamos en esta vida, haciéndonos despertar de ese letargo autoimpuesto, obligándonos
a buscar nuestro propio futuro por necesidad, más allá de expresarnos en querer
no pretender lo peor; o sin más, excusar ciertas conductas de mayoría “aniquilarías”,
dejándonos solamente la enseñanza final que siempre se mantendrá y en donde no
importa el dedicado mensaje de queremos legar, solamente nos quedara aceptar la
presencia de esa ola cambiante que cada vez se convierte en algo totalmente
inevitable.
Escrita y
dirigida por el director británico Alex Garland en su último largometraje hasta
la fecha y protagonizada por Kirsten Dunst, Wagner Moura, Cailee Spaeny,
Stephen McKinley Henderson, Sonoya Mizuno & Nick Offerman, en una narrativa
puramente polarizada pero sin márgenes para colores ni ideologías,
generalizando una concepción de lo que el abismo contiene, materializando cada
preámbulo de un futuro no muy alejado del presente actual y perfectamente
factible a niveles poco distópicos pero sin abandonar el género, haciéndonos un
mapa de lo que "podría ser" pero no necesariamente tendría que serlo.
Music by Ben
Salisbury & Geoff Barrow
Comentarios
Publicar un comentario